Tras valorar los medios de pruebas, declaraciones y otros presentadas en el juicio oral, ayer, el juez Luis Pasquel Paredes del Cuarto Juzgado Unipersonal de Huánuco condenó a 6 años de cárcel a dos suboficiales de la Policía tras ser hallados culpables del delito contra la administración pública en la modalidad de cohecho pasivo propio en el ejercicio de la función policial.
En la lectura parcial de la sentencia, el juez dispuso que César Augusto Salazar Jauregui (36) y Edwar Augusto Revilla Vargas (36) deben pagar 10 mil soles por concepto de reparación civil a favor del Estado. Asimismo, ambos agentes que permanecen en la clandestinidad desde el 2020 fueron inhabilitados para ocupar cargos públicos.
HECHOS.
El 30 de julio del 2020 en circunstancias que Lindon Tapia Martel conducía el automóvil negro marca Hyundai de placa AZP-201 de Tingo María a Huánuco fue intervenido en la zona de Cochas, distrito de Chinchao por agentes de la Policía de Carreteras (Salazar y Revilla) por trasladar 315 kilos de hoja de coca de propiedad de Donita Yuli Fernández Santiago.
Tras la intervención, el total de la coca fue incautada pero a ENACO sólo internaron 100 kilos, desconociéndose a donde fueron a parar los otros 215 kilos, pero lo sorprendente pasó después cuando el suboficial de apellido Salazar llamó a la dueña de la mercancía para pedir disculpas por haber incautado su mercadería y su compromiso era que en adelante iban a trabajar permitiendo pasar los paquetes.
Es así que el 11 de agosto a las 8:00 de la mañana en circunstancias que Lindon Tapia trasladaba 90 kilos de hoja de coca de Tingo María a Huánuco a la altura de Limón Pampa, distrito de Amarilis fue intervenido por los mismos suboficiales a quienes el conductor les indicó que la coca era de la señora Donita Yuli Fernández y que ella ya había conversado, pero los suboficiales Revilla y Salazar desconocieron el acuerdo y pidieron conversar con la comerciante.
En la comunicación telefónica que entablaron, el entonces suboficial César Salazar en coordinación con Edward Revilla pidió a la comerciante 2 mil soles para no decomisar la totalidad de la hoja de coca que era trasladado en el automóvil negro, pero Donita dijo que era mucho, pero luego aceptó por lo que el patrullero escoltó al automóvil hasta la casa de la ahora denunciante.
Estando en la puerta del inmueble, Donita Fernández, salió y dijo que no tenía esa cantidad y que por lo mucho que podía darles era 500 soles, propuesta que el suboficial Salazar rechazó iniciándose una discusión por lo que tuvo que intervenir un familiar de la comerciante que cuestionó la actuación del policía por lo que Salazar Jauregui huyó del lugar. Cuando creían que iba a quedar ahí, el 4 de agosto el mismo suboficial llamó insistentemente solicitando la entrega del dinero, por lo que la agraviada denunció el caso en la fiscalía Anticorrupción.
Las llamadas que los policías hicieron para cobrar el dinero fueron grabadas por el Ministerio Público incluso los suboficiales Revilla y Salazar enterados de la denuncia buscaron a la comerciante para ofrecer dinero y cambiar su versión, hecho que no fue aceptado. (Fuente: Tu Diario Hco)
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